La historia de Sadie
Hola, mi nombre es Sadie! Soy el chico nuevo en la familia... solo que soy una niña. De hecho, llevo algunas semanas, así que considérame una prueba de que los niños posteriores reciben mucha menos prensa. Decidí dejar de esperar a que mi mamá lo hiciera y seguir adelante y presentarme. ¡Hola a todos!
Nunca olvidaré cuando conocí a mi nueva familia. ¡Habían dejado a mi camada en el refugio y nos lo estábamos pasando genial! Recibimos mucha comida y visitas al médico de cachorros y jugábamos juntos todos los días. Pero uno a uno mis hermanos y hermanas se fueron con nuevas familias y yo terminé solo. Este día en particular había sido difícil. Estaba muy ocupada entrevistando a familias para adoptar, tratando de mantenerme alegre, tratando de lucir adorable y tratando MUY DURO de no orinar. en. el. gente. Fue un trabajo agotador. Pero después de todo eso, ahí estaba otra vez al final de otro día. Solo. Un poco triste. Y realmente muy asustado.
Entonces escuché la voz de una chica a lo lejos pidiendo pasar por mi pasillo. Era un pasillo largo con una habitación oscura y vacía tras otra, y yo estaba al final. ¿Cómo podría encontrarme alguna vez? ¿Cómo podría decirle que estaba allí? Sólo había un camino. Entonces, tomé el mayor aliento de cachorro que pude y con todo mi poder desde la punta de mi cola hasta la parte superior de mis orejas, dejé escapar el grito de perro más fuerte, más malo y más grande que pude reunir. “¡Por favor sigue buscando, pequeña, estoy por aquí! ¡¡Aquí mismo!!"
De repente, miró a través del cristal y miró dentro de mi jaula. Jadeé. Era la chica más bonita que había visto en toda mi vida. Nos miramos a los ojos. Ella chilló y luego yo chillé y luego ella se escapó chillando un poco más. ¡Pero ella no me iba a dejar, sólo me preguntaba si podía abrazarme! Estaba tan emocionado que creo que tintineé en ese mismo momento.
La señora del refugio nos llevó a una pequeña habitación donde pude acurrucar a esa linda niña. Luego lamí y olí a las otras personas de su camada. ¡Incluso sus mayores me abrazaron! Noté que todos miraban al papá, esperando que dijera que no para llevarme a casa. Pero supe que en el momento en que mi papá me abrazara, nunca jamás me dejaría.
Cerramos el refugio esa noche después de que todos se habían ido a casa. Pero a diferencia de las otras noches en las que regresaba a la perrera y dormía solo, esa noche adopté a mi nueva familia. Todos se llenaron de lágrimas y me abrazaron fuerte mientras nos alejábamos, en dirección a mi hogar definitivo. No podía esperar a llegar allí y explorar todas las partes y oler todos los olores, pero mis ojos se pusieron muy somnolientos. El sonido de sus voces y la alegría de sus risas era como una manta esponjosa alrededor de mi corazón y me quedé dormido, sintiéndome seguro, sabiendo que nunca volvería a estar solo. ¿Porque esta gente? Supe de inmediato que eran mi tipo de personas. Se querían mucho y me querrían mucho a mí también. Así que los rescaté a todos... tan rápido como pude.